top of page

QUERIDA VERÓNICA-Miguel Ángel Londoño Franco

  • Foto del escritor: STEFANNY SANTA BEJARANO
    STEFANNY SANTA BEJARANO
  • 4 ago 2020
  • 2 Min. de lectura

Cali, Valle del Cauca/2020


De: Miguel

Para: Vero


Querida Verónica, escribo esta carta únicamente con el fin de poder plasmar mis emociones y pensamientos que se guardan en mi cofre. Bueno, fue tiempo atrás desde que te conocí, y para ser sincero, no es que me haya quedado atónito por tu presencia, de hecho, pasabas desapercibida de mi visión y panorama. Yo seguía luchando por adaptarme en un instituto con desconocidos, el cual, supongo que era el problema más grande para un niño de doce años, tener amigos y formar el grupo típico para no quedarse vagando por no tener pareja en conjuntos de trabajo, para que, al final me toque con el más inservible del salón. Fueron dos años donde yo seguía yendo y viniendo al colegio, continuando mi rutina monótona, sin nada nuevo, sin poder avanzar.


Fue alrededor del tiempo dicho que, nos juntamos a hablar como cualquier persona haría, pero esta vez fue diferente, me sentía cómodo contigo, sentía que podía contarte mis problemas cómo: no poder comprar mi chocolatina Jet a tiempo, con mis dificultades para algunas tareas, con mis cagadas en diferentes situaciones… Lo mejor de todo, era que por fin me sentía yo, y eso era algo que nunca me había pasado. Fuimos hablando más a menudo: llamándonos, riéndonos, juntándonos; en fin, ya se volvía una necesidad, en vez de un pasatiempo.

Fui aprendiendo contigo poco a poco, a ver el mundo de manera diferente, de una manera en que nadie me mostró, mejoré y ahora eso te lo debo a ti, esa persona vacía que observo atrás mío, fue reemplazada por la mejor versión, una versión actualizada, la cual viene con funciones avanzadas y que son de gran utilidad.

Ahora, ya pasados cinco años atravesando situaciones tan difíciles y delicadas, puedo decir que he madurado como ningún otro ser que conozca, he caído y me has ayudado a levantar, lo que ha producido un Miguel que actualmente, está orgulloso de lo que es.


Gracias, gracias por llegar a mi vida de manera inesperada, gracias por querer ser mi compañera en el camino del destino, gracias por ser tú misma, gracias… Verónica.



Miguel L.



ree


Comentarios


bottom of page