FINAL ALTERNATIVO "CAPERUCITA ROJA"- Zharick Viviana Castillo Silva.
- KAREN DAYANNA ARROYO PAYAN

- 7 ago 2020
- 3 Min. de lectura
Por: Zharick Viviana Castillo Silva.
Y ahí estaba Caperucita a mi lado, íbamos de camino para donde la abuela. De verdad que muchas personas podrían ver esto como algo tan normal, pero para mí era tenerla cerca, poder sentir su olor y admirarla ya no desde tan lejos si no un poco más de cerca. Durante todo el camino solo la miré, solo sentía cómo mi corazón latía cada vez más fuerte, cuando ella me hablaba o sonreía era sentir que la tenía cerca, tenía tan poco pero sentía que tenía mucho. Y, tomé una decisión, nunca antes lo había hecho pero ya era hora de hacerlo, podía perder lo mucho que tenía pero debía aunque sea intentarlo, existía una remota posibilidad de poder ser feliz a su lado.
- Debo decirte algo que te lo he querido decir desde hace mucho tiempo... - podía sentir como mi nivel de nervio aumentaba, no podía procesar las palabras, sentía que iba a tener un ataque de ansiedad de esos que no te dejan ni respirar.
- ¡Claro!, dime Su sonrisa se asomó, esa dentadura preciosa, esa manera de hablar, expresarse y mirar, la quería para siempre a mi lado.
- Hace algún tiempo te miro desde el bosque, sé que muy pocas palabras hemos cruzado pero contigo siento que encontré todo lo que buscaba es como si me hubiera ganado el baloto sin ni siquiera jugarlo. Me gustas demasiado -traté de procesar algo más, quería decir mucho pero no me salían más palabras.
- Ehh, me dejas sin comentarios la verdad es que por ti siento una pequeña atracción, no es mucho pero puede crecer a la misma magnitud de lo que tu sientes por mí. Si antes no tenía palabras ahora menos, simplemente afirmé con un movimiento de cabeza, trataba de procesar pero no lo podía creer, es como si después de todo lo que quise que ese momento llegara ahora no lo creyera, siempre quise que llegara pero no pensé en qué haría si llegaba a suceder.
Llegamos donde la abuela, el largo camino se había hecho corto de tanto mirarla.
- ¿Me podrías hacer un favor? Es que, sé que suena muy raro, pero mi abuela tiene mucho dinero y lo quiero. Quiero ese dinero para poderme ir a vivir contigo, escapar, poder amarte y vivir una vida a tu lado.
- Sí, dime qué hay que hacer. - ¡no podía de la felicidad! Ella quería lo mismo que yo y me dije a mí mismo que iba a hacer todo lo que ella me pidiera.
-Mata a mi abuela... es la única manera en la que podemos tener el dinero e irnos.
Antes de tocar a la puerta ella me había dicho que la matara. No sabía qué hacer, podría tener una vida con ella solo era cuestión de matarla, y después de pensar decidí que sí, le haría un favor a la abuela, la señora ya era muy vieja y tenía muchas enfermedades, yo solo iba a acelerar un poco el proceso. Cuando ella abrió le dije a Caperucita que se quedara afuera. Me acerqué a la abuela, la hice caer al suelo, cojí una almohada que estaba cerca se la puse en la cara y eso la asfixió. Durante el tiempo que estaba luchando para que se la quitara de encima sentí que la quería salvar pero el amor me pudo más. Cuando salí, Caperucita tenía una sonrisa muy linda, no había nadie cerca de nosotros. Ella se acercó a mí y me besó, le seguí el beso, duró aproximadamente 30 segundos y fue demasiado lindo. Después, ella entró a la casa, cerró la puerta y a los 5 minutos salió. Tenía una bolsa negra en la mano y corrimos. Corrimos durante horas, y llegamos a una estación de buses, la mamá empezaba a llamar a Caperucita y ella decidió dejar el celular en un camino. A los pocos minutos llegamos a una estación de buses y nos montamos en el primero que vimos que iba saliendo. Llegamos a un lugar completamente nuevo y muy lindo, pasamos la noche en un hotel y había algo que no me gustaba de la situación, ella era humana, yo era un animal, debíamos de ser de la misma especie. Le manifesté mi inconformidad ante la situación y ella dijo.
- Para eso es el dinero, mañana te llevaré a donde una bruja que conozco y ella te hará humano, gracias por lo que hiciste hoy, demostraste lo mucho que me amas. He estado esperando un amor así desde hace mucho tiempo.
Al día siguiente Caperucita me llevó donde la bruja y sí, me transformó en hombre me dolió pero cuando volví a abrir mis ojos era un chico muy hermoso, ahora sí merecía tenerla a mi lado por siempre y para siempre. Y así fue, nos fuimos a otro país, nos casamos y fuimos muy felices. ¡Fin!



Comentarios